Un año en la blogósfera

Fue el 18 de enero de 2005 cuando comencé a trabajar mi primer blog al cual puse por nombre Letra Suelta. En ese entonces utilicé Blogia, uno de los sistemas de gestión de bitácoras, pues me resultaba más sencillo su actualización.
En un principio en ese espacio tenía la intención de publicar sólo crónicas urbanas, pero con el correr del tiempo no podía pasar por alto algunos temas relacionados al periodismo y la comunicación en general.
No puedo olvidar que algunas personas como Dennis Dávila y Juan Carlos Luján me apoyaron en los inicios de esta aventura. Como tampoco se puede negar la importancia que viene cobrando esta nueva herramienta de comunicación.
Fue por eso que, a mediados del año pasado, me involucré en la organización del seminario sobre Periodismo digital en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, donde el tema de fondo fue Los weblogs y su impacto en la sociedad.
Luego traté de convencer a algunos periodistas para que lanzarán sus propias bitácoras. No me equivoqué cuando busqué a Rolly Valdivia, amigo y colega de varias aventuras periodísticas, cuyo blog de viajes es imperdible.

Mi paso a blogger
En julio de 2005, decidí pasarme a Blogger. El motivo: la enormes potencialidades y herramientas que en él se ofrecen. Hasta el momento no tengo quejas. Aunque debo admitir que el cambió o la mudanza no fue sencilla, pero paulatinamente me fui acostumbrando.
Hoy 18 de enero de 2006 Letra Suelta cumple un año en la blogósfera. Durante todo este tiempo he conocido nuevas personas y colegas, tanto del Perú como del extranjero. Nada es comparable con el intercambio de información y experiencias.Un año en la blogósfera.

Hasta aquí este apretado resumen de mi experiencia en la blogósfera. De hecho existen más anécdotas que los narraré en otro post. Sólo me queda hacer una promesa final: continuar utilizando esta herramienta de comunicación. Y a ustedes, mis lectores, gracias por su compañía.